“El placer no tiene por qué ser sucio”. Esta frase resume a la perfección la importancia de mantener una limpieza de juguetes sexuales. Y es que, aunque nos dé vergüenza reconocerlo, la higiene íntima también se aplica a esos objetos que utilizamos para satisfacer nuestros deseos más profundos.
Sea cual sea el juguete sexual que utilices, es imprescindible limpiarlo a fondo después de cada uso. De lo contrario, se acumularían bacterias, fluidos y sustancias que podrían causar infecciones e irritaciones muy molestas en esa zona tan sensible.
En este artículo te explicaremos todos los trucos, consejos y recomendaciones para la limpieza de juguetes sexuales a la perfección. Descubrirás los mejores métodos en función del material, las ventajas e inconvenientes de cada uno, y desmontaremos algunos mitos sobre el uso de productos como el amoniaco. ¡Toma nota!
Un poco de historia
Aunque pueda sorprender, los juguetes sexuales llevan entre nosotros mucho más tiempo del que pensamos. Existen referencias a objetos de estimulación sexual desde la antigua Grecia y el antiguo Japón.
Sin embargo, no fue hasta finales del siglo XX cuando los juguetes eróticos empezaron a popularizarse. En la década de los 60 surgieron los primeros vibradores modernos. Y en los 90 aparecieron los masturbadores masculinos y juguetes de materiales novedosos como el látex o el gel.
La industria del sexo ha ido innovando con nuevos diseños, formas, texturas y materiales para elevar el placer. Pero algo que no ha cambiado es la necesidad de una limpieza de juguetes sexuales después del uso.
¿Por qué limpiar un juguete sexual tras su uso?
Más allá de los tabúes, conviene recordar que los juguetes sexuales entran en contacto con zonas íntimas y fluidos corporales. Si no se limpian correctamente, pueden convertirse en un foco de infecciones y contagio de enfermedades.
Las principales razones para desinfectar un juguete sexual son:
Evitar la transmisión de ETS
Los juguetes pueden alojar bacterias y virus que causen enfermedades de transmisión sexual (ETS) como el papiloma o la gonorrea. Limpiarlos evita contagios.
Prevenir infecciones urinarias o vaginales
La humedad y los restos de orina, semen o flujo vaginal favorecen la proliferación de hongos y bacterias causantes de estas molestas infecciones.
Eliminar malos olores
Los fluidos genitales yother eros secretados durante el uso del juguete se oxidan y generan mal olor. Limpiar y secar bien evita que huelan mal.
Alargar la vida del juguete
La suciedad, fluidos y bacterias deterioran los materiales porosos de muchos juguetes sexuales. La limpieza de juguetes sexuales alarga su vida útil.
Mayor placer en el siguiente uso
Un juguete limpio y sin residuos provoca mejor contacto, deslizamiento y sensación de suavidad sobre la piel. ¡El sexo será más placentero!
Métodos de limpieza según el material del juguete
No todos los juguetes sexuales se limpian de la misma forma. El método dependerá de los materiales de fabricación:
Silicona
La mayoría de juguetes están hechos de silicona, un material poroso que requiere una limpieza a fondo. Sumerge el juguete en agua tibia con jabón neutro durante 5-10 minutos, frótalo suavemente y aclara bien.
También puedes usar un limpiador antibacteriano o esterilizador. Ojo, la silicona se deteriora con algunos productos químicos. ¡Nunca uses amoniaco!
Plásticos duros
Para juguetes de PVC, acrílico, plástico duro, etc. Basta con agua tibia y jabón, frotar bien y aclarar. Secar bien antes de guardarlo.
Cauchos y látex
Sumergir en agua tibia con jabón neutro, frota suavemente y aclara. Secar al aire, el látex se pudre dentro de fundas cerradas. ¡Ojo! El látex se degrada con aceites.
Ciberskin y UR3
Estos materiales porosos imitan muy bien la piel humana, pero acumulan bacterias con facilidad. Usa un esterilizador o deja el juguete en remojo 30 mins en una solución de agua y vinagre (proporción 10:1).
Metal
El metal es hipoalergénico y fácil de desinfectar. Lava con agua y jabón, frota con cepillo de cerdas suaves y aclara bien. Seca rápidamente para evitar oxidación.
¡Y listo! Con estos consejos podrás limpiar y cuidar tus juguetes para que te duren mucho tiempo. Eso sí, no olvides hacerlo después de cada uso, es la mejor forma de prevenir infecciones.
Cómo limpiar un Fleshlight y otros juguetes de orificios
Los juguetes sexuales con orificios, como los masturbadores tipo Fleshlight o las muñecas hinchables, requieren una atención especial por dentro. Sigue estos pasos:
- Retira la tapa y vierte agua templada dentro del orificio. Agita suavemente.
- Vierte un poco de jabón líquido para manos dentro y agita. Enjuaga varias veces hasta que salga limpia.
- Desinfecta rociando una solución de 1 parte de vinagre y 9 de agua. Deja actuar 10 minutos.
- Aclara bien con agua templada hasta eliminar todo rastro de jabón.
- Desensambla las partes en juguetes tipo Fleshlight y sécalas por dentro con papel de cocina.
- Deja secar al aire completamente antes de volver a usarlo.
Con esta rutina conseguirás una limpieza de juguetes sexuales profunda interna, fundamental para prevenir bacterias y mohos en juguetes de orificios.
Trucos caseros para limpiar juguetes sexuales
Existen muchos remedios naturales que puedes usar para desinfectar tus juguetes íntimos. Estos son algunos trucos:
- Vinagre: Desinfecta y elimina olores a la perfección. Usa 1 parte de vinagre y 9 de agua.
- Zumo de limón: También desinfecta y desodoriza dejando un agradable aroma cítrico.
- Agua oxigenada: Diluida al 50% tiene poder desinfectante. Úsala en juguetes de silicona y plástico duro.
- Jabón de glicerina: Limpia en profundidad sin dañar la silicona. Enjuaga bien para eliminar restos.
- Peróxido de hidrógeno: Estupendo desinfectante casero. Diluye al 0,5% para no dañar los materiales.
Prueba estos ingredientes naturales para limpiar tus juguetes sexuales de forma segura, eficaz y económica. ¡Tu salud vaginal e íntima te lo agradecerá!
Mito o realidad: ¿Puedo usar amoniaco para limpiar un juguete sexual?
FALSO. Un mito muy extendido es que se puede desinfectar un juguete con amoniaco, pero ¡nada más lejos de la realidad!
El amoniaco es demasiado agresivo y dañará irremediablemente la superficie de juguetes de silicona, gel, plásticos blandos o cualquier material poroso. Los deteriorará y generará fisuras donde se acumularán bacterias.
Los sexólogos tampoco recomiendan el amoniaco para limpieza vaginal o anal. Las mucosas son muy sensibles y el amoniaco puede irritarlas seriamente, incluso llegar a provocar quemaduras.
Así que ya sabes, mantén tu amoniaco lejos de los juguetes sexuales. Usa solo productos diseñados específicamente para su limpieza o los remedios caseros vistos antes.
Cómo secar y guardar los juguetes sexuales limpios
Una vez desinfectados, es importante secar bien los juguetes antes de guardarlos. La humedad residual podría dañarlos y favorecer el crecimiento de moho y bacterias.
Para secarlos, usa papel de cocina absorvente en orificios y superficies. Deja secar al aire unas horas antes de guardar. No uses secador de pelo, la temperatura podría derretir algunos materiales.
Guárdalos en una bolsa, caja o funda, nunca en contacto directo entre ellos para prevenir daños. Lo ideal es una funda de tela transpirable como el algodón para que respiren. ¡Y listo! Así estarán perfectos para tu próximo momento de intimidad.
Anécdotas y curiosidades sobre juguetes sexuales
A lo largo de la historia, los juguetes eróticos han protagonizado algunas anécdotas y curiosidades sorprendentes:
- En la antigua Grecia se usaban consoladores de madera, cuero o piedra llamados “olisbos”. Las cortesanas los llevaban en cinturones especiales.
- Cleopatra inventó uno de los primeros vibradores de la historia. Lo creó con un panal lleno de abejas que vibraba por el movimiento de estos insectos.
- El anillo vibrador se inventó para facilitar la labor de médicos que manualmente tenían que provocar el “paroxismo histérico” (orgasmo) a las mujeres como remedio médico.
- La palabra “dildo” proviene de la época colonial americana. Los colonizadores españoles vieron los penes de piedra rituales de los indígenas y los llamaron “dildos”.
- Los japoneses fueron los primeros en crear muñecas sexuales de Silicona hiper-realistas en los años 80. Su perfección asustaba a los visitantes occidentales.
- En la década de los 90, aparecieron los primeros condones con formas y texturas para aumentar el placer del hombre y de la mujer.
Estas son algunas curiosas anécdotas históricas que demuestran que los humanos llevamos siglos buscando nuevas formas de estimular nuestros sentidos. ¡Los juguetes sexuales still going strong!
¿Cómo limpiar un juguete anal correctamente?
Los juguetes anales también requieren una limpieza exhaustiva. La zona anal alberga multitud de bacterias y es más delicada. Sigue estos consejos:
- Usa preservativos en los juguetes anales. Facilita la limpieza y evita infecciones.
- Lava el juguete con agua tibia y jabón antibacteriano después de cada uso. Frótalo bien.
- Desinfecta con una solución de 10 partes de agua y una de lejía. Deja actuar 10 minutos. Aclara.
- Seca con papel de cocina. No compartas juguetes anales con nadie.
- Guarda en una funda o caja no porosa. Nunca junto a juguetes de otras zonas.
La limpieza anal requiere paciencia, pero es muy importante. Valora usar juguetes desechables o fundas nuevas para minimizar riesgos. Tu salud vale la pena.
Beneficios de usar juguetes sexuales limpios
Mantener la higiene en los juguetes sexuales reporta grandes beneficios para la salud, más allá de evitar contagios:
- Reduce irritaciones e infecciones en genitales y áreas sensibles. Podrás disfrutar sin dolor o picores.
- Previene malos olores. Los juguetes limpios huelen mejor y provocan más apetito sexual.
- Mejora la lubricación natural al evitar alterar el pH vaginal o anal con bacterias.
- Aumenta el placer al poder usar los juguetes con total tranquilidad y confianza.
- Alarga la vida útil de tus juguetes predilectos, cuidando sus materiales.
Ya ves, invertir unos minutos en una buena limpieza de juguetes sexuales tiene solo ventajas. ¡Tus encuentros íntimos serán mucho más placenteros!
En resumen: El proceso completo de limpieza ide
Para que te quede claro el proceso completo de limpieza ideal de un juguete sexual, aquí te lo resumimos en 5 pasos:
- Elige un jabón antibacteriano apto para el material del juguete. Los de pH neutro son los más seguros.
- Lava el juguete en agua tibia frotándolo por todas partes. Usa cepillo de cerdas suaves si es necesario.
- Desinfecta sumergiéndolo en una solución de agua y vinagre o lejía bien diluida. Deja actuar unos minutos.
- Aclara muy bien con abundante agua para eliminar cualquier resto de jabón o desinfectante.
- Seca con papel de cocina y deja terminar de secar al aire antes de guardarlo en su funda.
¡Y ya estaría! Solo te llevará 5-10 minutos prolongar la vida de tus juguetes sexuales favoritos. Dedícales un poquito de mimo, ellos te lo agradecerán dándote muchas noches de placer.
Espero que esta guía definitiva te haya aclarado cualquier duda sobre la limpieza de tus juguetes íntimos. Recuerda hacerlo siempre después de cada uso y sigue los consejos según el material de fabricación. Mantener la higiene en estos objetos tan delicados es fundamental para disfrutar de una sexualidad sana y plena. ¡A limpiar esos juguetes!