Las fantasías sexuales forman parte de la vida sexual de la mayoría de las personas. Todos tenemos fantasías sexuales más comunes que nos permiten explorar deseos ocultos, añadir emoción a la intimidad y descubrir nuevos placeres. Pero no todo el mundo se siente cómodo hablando de sus fantasías.
En este artículo desvelaremos cuáles son las fantasías sexuales más comunes y cómo disfrutar de ellas de forma segura y placentera. Descubrirás curiosidades, consejos prácticos y trucos para convertir tus fantasías en realidad. ¡Empecemos!
Origen e historia de las fantasías sexuales
Las fantasías sexuales han existido desde los albores de la humanidad. En la antigua Grecia y Roma ya hay referencias a fantasías en obras literarias.
Según los historiadores, el origen de las fantasías sexuales podría estar en la búsqueda del placer y la necesidad de escapar de las estrictas normas sociales. Permitían explorar deseos prohibidos o inaccesibles.
Con el paso del tiempo las fantasías se han ido diversificando, gracias en parte a la mayor exposición a diferentes prácticas sexuales en películas, literatura u otros medios. Sin embargo, las más comunes se han mantenido estables en los estudios realizados.
Cuáles son las fantasías sexuales más comunes
Según un estudio realizado en Estados Unidos, estas son las 7 fantasías sexuales más comunes entre hombres y mujeres:
1. Tener relaciones sexuales en un lugar público
La idea de ser sorprendidos o vistos mientras se practica el sexo es la fantasía número uno. Lugares como una playa desierta, un bosque, un probador o el cine añaden morbo y emoción al encuentro sexual.
2. Participar en un trío
Compartir pareja con otra persona permite disfrutar de una experiencia nueva y liberadora. Los tríos más frecuentes son de dos mujeres con un hombre o de dos hombres con una mujer.
3. Tener sexo con un desconocido
El anonimato y la atracción instantánea por un extraño son poderosos afrodisíacos. Apps como Tinder han popularizado los encuentros sexuales esporádicos.
4. Ser observado mientras se practica sexo
Exhibirse ante la mirada de otra persona despierta pasiones ocultas. Se puede empezar con juegos de roles donde la pareja se observa y luego ir subiendo la apuesta.
5. Dominar o ser dominado
El juego de sumisión y dominación consiste en que una persona toma el control y la otra obedece sus órdenes. Puede incluir manos atadas, uso de látigos y palabras subidas de tono.
6. Intercambio de parejas (swinging)
Consiste en intercambiar la pareja con otras personas para tener relaciones sexuales. Se hacen fiestas swinger donde las parejas se seleccionan entre sí.
7. Fantasías de violación
La idea de ser forzado a tener relaciones contra la propia voluntad es una fantasía frecuente, sobre todo en mujeres. Se trata de una simulación donde se establecen límites y reglas.
Como ves, las fantasías más comunes suelen girar en torno a lo prohibido, la atracción por desconocidos y el deseo de intensificar las emociones sexuales. A continuación profundizaremos en ellas.
Fantasías sexuales más comunes en hombres y mujeres
Aunque existen coincidencias, también hay diferencias entre las fantasías masculinas y femeninas:
Fantasías sexuales más comunes en los hombres
- Tener relaciones con dos mujeres a la vez (trío FFM)
- Hacer un trío MMF o participar en una orgía
- Mantener relaciones con una amiga o conocida
- Tener sexo en lugares públicos
- Dominar o ser dominado
- Fantasías con celebridades o famosas
Según los sexólogos, las fantasías masculinas suelen centrarse más en la cantidad (más mujeres, más personas) mientras que las femeninas se enfocan en la calidad del vínculo.
Fantasías sexuales más comunes en las mujeres
- Sumisión y dominación ligera
- Sexo romántico con un desconocido
- Ser observada mientras tiene relaciones
- Recibir sexo oral
- Fantasías de violación
- Tener sexo con otra mujer
- Ser deseada por varios hombres
Las mujeres tienden a fantasear más sobre la atracción, el romance y la conexión emocional junto con el sexo.
¿Cuál es la fantasía sexual más común?
Según los estudios realizados a lo largo de décadas, la fantasía sexual más común tanto en hombres como en mujeres es:
Tener relaciones sexuales en un lugar público o al aire libre.
Esto no ha cambiado a pesar de la evolución social. Posiblemente se debe a que introduce un elemento de peligro y adrenalina. Además, la posibilidad de ser descubiertos intensifica la emoción del encuentro.
Otras fantasías muy extendidas son participar en tríos, el intercambio de parejas y las prácticas de dominación y sumisión. En el fondo, la mayoría giran en torno a la idea de traspasar límites, probar lo socialmente inaceptable y añadir pasión a la vida sexual.
Origen de las fantasías más comunes
¿De dónde proceden estas fantasías sexuales que tantas personas comparten? Los expertos creen que se originan de:
- La necesidad de intensificar la emoción y el deseo en la pareja. Salirse de lo normativo mediante fantasías provoca una mayor atracción.
- La búsqueda de lo nuevo y prohibitivo, que despierta mucha curiosidad sexual.
- El atractivo que provocan los desconocidos, por su anonimato y misterio.
- El deseo de traspasar límites y huir de la rutina sexual.
- La excitación que produce el riesgo de ser descubiertos en lugares públicos.
- La atracción visual de observar y exhibirse ante otra persona.
- El intercambio de poder que se da en las fantasías de dominación y sumisión.
En definitiva, la mente busca constantemente nuevas formas de obtener placer, y las fantasías permiten explorar deseos ocultos de forma segura.
Consejos para cumplir tus fantasías sexuales
¿Quieres convertir tus fantasías en realidad? Estos consejos prácticos te ayudarán:
- Comunícate con tu pareja: Explícale tus deseos con una actitud abierta y sin prejuicios. Pregúntale también por sus fantasías.
- No fuerces: Las fantasías deben vivirse de forma consensuada y sin presiones. Nunca hagas nada que tu pareja no desee.
- Empieza poco a poco: Da pequeños pasos para ir entrando en confianza. Por ejemplo, con juegos de rol o viendo cine erótico que inspire vuestras fantasías.
- Establece límites: Incluso en las fantasías más extremo es esencial fijar límites en cuanto a prácticas, duración, lugar, etc. Esto aporta seguridad.
- Crea ambiente: La música, iluminación, vestuario y lugares especiales contribuyen a meterse de lleno en el papel.
- Ríete y disfruta: Mantén el sentido del humor. Lo más importante es divertirse y gozar de una conexión íntima.
Recuerda que lo esencial es que ambos estéis cómodos. No tengas prisa en hacer realidad una fantasía, tómatelo con calma. ¡El camino puede ser tan excitante como el destino!
¿Puede una fantasía sexual salvar una relación?
¡Sí, sin duda! Compartir y realizar fantasías sexuales puede revitalizar una relación.
Permite a la pareja descubrir nuevos deseos, aumentar la complicidad y romper con la rutina. Esto se aplica tanto a relaciones largas como a matrimonios con años de vida en común.
Anécdota: Un estudio descubrió que las parejas que realizaban sus fantasías íntimas tenían un índice de satisfacción mayor y eran menos proclives a la infidelidad.
Algunos beneficios de incorporar fantasías en la relación:
- Aumenta el erotismo y la atracción mutua.
- Mejora la comunicación y la confianza.
- Incrementa la dopamina y oxitocina (hormonas del bienestar).
- Renueva la energía y pasión sexual.
- Enseña más del otro y fortalece la unión.
Por supuesto, es clave hacerlo de forma segura, consensuada y desde el respeto. La comunicación, los límites y el sentido del humor son esenciales.
Si una pareja se atreve a explorar sus fantasías más íntimas, puede alcanzar nuevas cotas de placer y romanticismo. ¡Anímate a probarlo!
Mitos sobre las fantasías sexuales
Existen algunos mitos extendidos sobre las fantasías sexuales:
- “Tener fantasías es malo para la relación” -> Falso, de hecho pueden mejorarla si se comparten.
- “Si mi pareja tiene ciertas fantasías es que no está satisfecha” -> No tiene por qué. Las fantasías son complementarias al sexo real.
- “Cumplir fantasías es peligroso” -> Con comunicación y medidas de seguridad no tiene por qué serlo.
- “Mejor no decirle a mi pareja mis fantasías para no molestar” -> La comunicación es la base en la pareja. Nunca sabrás si también es su fantasía si no lo compartes.
- “Si no quiero hacer realidad una fantasía significa que no amo a mi pareja” -> Cada persona tiene sus propios límites y deseos, lo cual se debe respetar.
Lo más importante es naturalizar las fantasías como parte de la sexualidad humana. Compartirlas con la pareja de forma relajada y sin prejuicios aumenta la complicidad y mejora la relación.
Para terminar: claves para disfrutar de las fantasías
- Explora tus deseos más profundos sin culpa ni vergüenza. ¡La mente es libre!
- Comunica tus fantasías a tu pareja desde el respeto y con sentido del humor.
- Establece límites y haz sólo aquello con lo que ambos os sintáis cómodos.
- Usa los juegos de rol y la imaginación para dar rienda suelta a vuestras fantasías.
- Considera los juguetes sexuales y accesorios para añadir realismo y diversión.
Compartir y realizar fantasías con la pareja puede ser una experiencia muy enriquecedora. Recordad: lo más importante es divertirse, disfrutar de la complicidad y descubrir nuevos aspectos del deseo. ¡Atrévete a probarlo!